En momento de despedida me propongo a hacer algo innovador: mi primer post en español. No podría dejar de hacerlo, ¿no?
Este es un post melancólico y con aire de despedida. Mañana nos vamos de Madrid. Todavía falta un rato para volver a Brasil, lo haremos sólo en principios de septiembre, pero ya dejamos Madrid y luego España…
Madrid: en esos 9 meses me he enamorado de ti. Tú me has acogido, me has dado libertad y calidad de vida en nivel muy elevado. La poesía de tus calles y plazas, la simpatía y el mal humor de tu gente a la vez, las sonrisas de los camareros en los bares y la falta de simpatia de otros camareros en unos restaurantes.. La historia y el arte de que se encuentran en cada rinconcito… El frío y el calor extremos. Todo ha sido increíble en esa intensa ciudad.
Sin contar las importantes personas que han cruzado mí camino:
Susana y Lorena, siempre allí, en el Casino, con sus sonrisas, los montones de trabajo en las reuniones y otras actividades del Programa Comunitario de Seguridad Ciudadana;
Miguel, siempre trabajando mucho, intercambiando emails, archivos y documentos, además de muchas ideas y reflexiones sobre seguridad ciudadana aquí y allí;
Mis queridas y lindas amigas Jingxia y Marion, con nuestras largas conversaciones sobre todo, desde chismes, hasta importantes cuestiones existenciales. Las echaré mucho de menos… De hecho, ya las echo…;
Mí profesora y amiga, Leonor, que ha convertido la gramática en un arte y me ha enseñado mucho sobre el arte y cultura españoles;
Tod@s l@s amig@s del master del André en el IE… Ni los puedo nombrar, bajo el riesgo de olvidarme de alguien y así cometer una injusticia. Tod@s ell@s ya son verdaderos amig@s, que llevaremos para toda nuestra vida… Tod@s, sin excepción, nos han acogido y nos han hecho formar parte de algo muy especial. Con ell@os, hemos compartido emociones muy fuertes;
Margarida, que estuvo comigo prácticamente todas las semanas, con su sonrisa y fuerza vital. Una mujer batalladora que lucha para establecerse por aquí;
La Re, mí grande amiga brasileña, que ya es un poco española, con quién compartí momentos importantes aquí en España, tanto en Madrid, cuanto en Barcelona/Calleia. Mí amiga que dará a luz a un bebe “hispano-brasileiro”, y al Cariño, que me hizo escuchar Estopa y ya no puedo más parar.
Las despedidas son siempre un poco tristes. En esos últimos días todo que hacemos ya tiene ese carácter: de adiós.
Ayer salimos para tomar algo. Fuimos para la región de Huertas y allí hicimos las cosas como se hace por aquí: en el primer bar, una cañita con tapas, después, en el segundo, otra cañita con tapas, y en otro y en otro… Emocionados y contando a la gente que cruzaba nuestro camino que se trataba de nuestra despedida de Madrid: una manera de poder decir que estábamos muy agradecidos y orgullosos de la ciudad. ¡Fue una linda despedida!
(*Después coloco las informaciones y fotos de los bares, que merecen mucho la pena)
